Ensayo sobre la luz de la cocina antes del desayuno
Abri los ojos a las 530, Pablo me aviso que se iba como una hora despues. Despues de la religiosa inyeccion de antibioticos, evitaba la ducha y el trabajo del día, perder tiempo y vida con politicos, campañas, conferencias y gobernadores. Mire la cocina mientras escuchaba a los ataris, punkrock. Hace años que no lo escuchaba, recuerdo que los tocaba, rolas de corazones rotos y pasarla bien. Y la luz de la cocina, antes de cerrar la puerta para vivir un dia de trabajo.
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